por Alef Pérez
En la actualidad, en buena medida, los mexicanos comprenden su colectividad como mestiza, fruto del encuentro entre dos mundos. No obstante, tal visión obstaculiza ver la multiculturalidad del país, donde lo indígena en todas sus vertientes resulta fundamental. Así, un punto de encuentro nacional puede llegar a invisibilizar la pluralidad y ser parte del racismo existente en la sociedad.
En las ciudades, el indígena sufre la mirada discriminatoria de buena parte de la sociedad. Al ser transeúntes son vistos como desposeídos, el cual debe ser apartado del camino. En ocasiones, venden sus artesanías en la vía pública, mientras los curiosos intentan regatear y minimizar el trabajo para la creación, que puede alcanzar cifras irreales en comercios dentro de las zonas adineradas. En buena medida, los citadinos consideran como intrusos a los pertenecientes a las comunidades originarias.
En el campo, los occidentalizados ven con desprecio a los indígenas, en primera instancia, por percibir las diferencias y no comprenderlas. En algunos casos, el racismo llega a producir violencia al estar involucrado algún recurso natural como la tierra y el agua (López, 2021: 429). Sin olvidar, en caso de sufrir despojo alguna comunidad originaria, tal acción está justificada según la visión occidental, al plantearse que ellos no podrían darle un buen uso al recurso.
En el orden de las leyes, la misma Constitución resguarda los derechos de los pueblos indígenas, sin embargo, en la mayoría de los casos, las autoridades no están preparadas para tratar asuntos relacionados con ellos. Por su parte, los museos llegan a resguardar la civilización mesoamericana con recelo, aunque sus descendientes más cercanos étnicamente llegan a ser mal vistos en sus alrededores y pueden tener dificultades para acceder a los recintos.
En los medios de comunicación, el indígena resulta ridiculizado u obtiene una serie de características idealizadas, las dos formas de representar se alejan de la realidad. En ocasiones, el acercamiento directo a las comunidades es sólo para exhibir la miseria y volver un circo su misma representación.
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